En la tarde del miércoles 26, militares entraron a la casa de gobierno en Bolivia con tanques y varias unidades de uniformados.
Las tropas se desplegaron en la Plaza Murillo de La Paz y algunos efectivos ingresaron a la sede gubernamental.
El general Juan José Zuñiga, quien hasta el martes era jefe del Ejército antes de ser destituido, declaró a la prensa que hay una “movilización de todas las unidades militares” debido “a la situación del país”. El presidente, Luis Arce, advirtió que se estaba produciendo un despliegue “irregular” de tropas en la capital boliviana.
Zúñiga dijo que todas las unidades están acuarteladas y que liberarán a todos los “presos políticos”, sin embargo la ex presidenta Jeanine Añez, considerada por la oposición boliviana como principal presa política informó su” repudio total a movilización de militares que pretende destruir el orden constitucional”. También dijo que el gobierno actual debe irse pero a través del voto. Otro líder opositor, el ex gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho manifestó en redes su respaldo a las instituciones y a la democracia, llamó a respetar el mandato del voto popular.
La reacción de autoridades bolivianas y de la región se conocieron instantáneamente. El gobierno denunció un intento de golpe de estado. El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dijo que condenaba “de la forma más enérgica” lo que ocurría y aseguró que “El Ejército debe someterse al poder civil legítimamente elegido”. “La comunidad internacional, la OEA y la Secretaría General no tolerarán ningún quebrantamiento del orden constitucional legítimo en Bolivia o cualquier otro lugar”, añadió.
El presidente Luis Arce Catacora dijo que la democracia debe respetarse y llamó al pueblo a movilizarse. El expresidente Evo Morales aseguró que se está gestando un “golpe de Estado” y convocó a una movilización nacional para defender la Democracia.
Varios mandatarios y ex mandatarios de la región comunicaron sus posturas vía redes sociales. Santiago Peña escribió en su cuenta de X: “El Paraguay condena las movilizaciones irregulares del ejército de Bolivia denunciadas por el presidente Arce. Hacemos un enérgico llamado a respetar la democracia y el Estado de Derecho.
En 15 meses, el pueblo boliviano debe acudir a las urnas a elegir presidente. Con una oposición fraccionada, el Movimiento oficialista MAS dividido entre seguidores de Evo Morales y Luis Arce, y parte del ejército sublevado, el futuro es incierto.