“Que loco estás vos”, así me suele decir la gente cuando se enteran de los viajes que hago en bicicleta, pero tiene una explicación muy sencilla; es que el ciclismo es el deporte más completo y tiene varios beneficios favorables a la salud mental y física. Solo 60 minutos de pedaleo equivalen a 400 calorías menos, además de su efecto antiestrés y terapéutico. Por otra parte hay que decir que un buen pedaleo hace que nuestro cuerpo estimule y libere las hormonas de la felicidad que son serotonina, endorfinas, dopamina y oxitocina.
Los preparativos
Ante la llegada de la semana santa me alisté, preparé las alforjas y una posible ruta de 400 kilómetros de viaje en bicicleta por Argentina y Paraguay, así que salí el miércoles 27 bien temprano, crucé el nuevo puente Héroes del Chaco, pasé por el departamento de Presidente Hayes rumbo a Clorinda, provincia de Formosa. En migraciones crucé rápidamente y llegué a Clorinda.
Clorinda y la ruta 11
En Clorinda almorcé y compré algunas provisiones para luego después del mediodía tomar la famosa ruta 11 rumbo a la ciudad de Formosa. Esta ruta lamentablemente no tiene banquina y en su trayecto de más de 120 kilómetros prácticamente no tiene vecinos o lugar para dormir.
Durante mi recorrido por esta ruta me quedé sin agua y tuve que pedir a un camionero que estaba parado a un costado. Con el termo bien cargado y una altitud y viento favorable seguí mi viaje por la ruta, se vino la noche y tuve que seguir pedaleando ya que no encontraba un lugar seguro para instalar mi camping. Hasta que horas después de pedalear más de 110 kilómetros encontré por fin un puesto de la comisaría Cañada 12 donde me dejaron pernoctar en el patio. Cené bien y me tiré a la colchoneta quedándome dormido rápidamente y por más de 8 horas.
Rumbo a la ciudad de Formosa
Estaba a 40 kilómetros de Formosa, así que el jueves bien temprano desinstalé el camping, preparé las alforjas y salí pedaleando rumbo a la ciudad. Formosa es la capital de la provincia y del departamento homónimo y se encuentra al lado del río Paraguay y cuenta con una población de más de 222.000 habitantes y muchos atractivos turísticos.
Aproveché el día para recorrer y conocer el microcentro, la Catedral Nuestra Señora del Carmen, el museo histórico regional, la Costanera, Plaza San Martín y el paseo peatonal, si bien el jueves era feriado, pude recorrer y conocer estos lugares, sin embargo en migraciones me informaron que si quería volver a entrar a Paraguay tenía que cruzar de nuevo esa tarde con el último barquito.
Rumbo a Alberdi y Villa Oliva, Ñeembucú
El jueves de tarde dejé Formosa y cruce el río Paraguay hasta Alberdi, lugar donde aproveche también para conocer y pedalear, luego compré provisiones y salí por la ruta PY19 rumbo a Villa Oliva, Ñeembucú.
Llegué ya de noche a la pequeña ciudad de Villa Oliva, que queda a 40 kilómetros de Alberdi, así que fui directo a la comisaría donde me dieron lugar para pernoctar y dejaron usar el baño. El viernes bien temprano tomé un poco de mate, conversé con el policía que estaba de guardia, tomamos café y salí rumbo a Asunción que me quedaba 106 kilómetros.
Luego de cruzar gran parte de los esterales del departamento de Ñeembucú llegué a Villeta donde me crucé con una gran cantidad de pescadores, y siendo las 20:00 llegué a mi casa en el centro de Asunción tras pedalear más de 60 horas y 320 kilómetros.
Costo del viaje
La ecuación es bastante sencilla, como viajo en bicicleta y con mi camping el gasto en combustible y hospedaje es de cero guaraníes. La alimentación es combinada, es decir, llevo mi cocinita y preparo mi comida y complemento comprando más comida hecha y muchas frutas que encuentro por el camino. En general terminé gastando G. 190.000 aproximadamente.
Háganme caso y salgan a pedalear.